viernes, 21 de mayo de 2010

Español de Venezuela

EL ESPAÑOL DE AMÉRICA

Justo Fernández López

El español llevado a América por los conquistadores evolucionó de distinto modo según las regiones y las zonas de influencia de las lenguas indígenas. Todo dependió también del nivel de cultura de cada región: así no se puede comparar la región de Río de la Plata, de escasa cultura, con las altas culturas de los mayas y de los aztecas en Mesoamérica o la de los incas en los Andes.

Es importante para estudiar la evolución del español de América tener en cuenta que los conquistadores eran de diferentes provincias españolas. Las diferencias entre el español americano y el castellano peninsular son, sin embargo, no tan grandes como a veces se piensa. Las características típicas del castellano de América se encuentran ya en la península: Canarias, Andalucía, Galicia. Ya Colón llevó en sus viajes intérpretes. Él sabía las lenguas mediterráneas y sus intérpretes dominaban lenguas asiáticas. Al llegar a la isla El Salvador, comprobaron que los indios no entendían ninguna de las lenguas de los intérpretes. Colón tomó en su barco a cinco indios, que asustados se tiraron al mar y cuando llegaron a Santo Domingo no quedaba más que uno de ellos.

No existe una uniformidad lingüística completa en la América Hispana, pero sus variedades son menos discordantes entre sí que los dialectismos peninsulares. Sin embargo, es hoy más uniforme el español en Hispanoamérica que lo era cuando ésta pertenecía a España. Esto se debe a que en el siglo XIX se multiplicó la instrucción pública, con lo que se redujo el analfabetismo. La escuela ha sido el instrumento de la uniformidad, de modo que el español escrito es como el de la península, prescindiendo de determinadas formas léxicas.

El español no ha producido ninguna lengua criolla. La lengua criolla es una simplificación de la lengua corriente para reducirla a sus elementos primarios. Se reducen las formas verbales, el singular y el plural, los géneros se suprimen, queda una sola forma. Es la omisión de las partes orgánicas de una lengua que pueden ser difíciles para el aprendizaje. Es la reducción de la lengua alpasar de una cultura superior a una inferior. El francés ha producido muchos dialectos criollos. Al salir de Francia, el francés empieza a perder fuerza, p. e. en Haití. El protugués ha producido también mucho criollismo. EL inglés tiene varias formas criollas, como en Guayana.

El único ejemplo de presunta lengua criolla del español es el papiamento, que en el fondo tiene influencia portuguesa, holandesa y española sefardita. No es una lengua criolla española, pero sí portuguesa. Los judíos españoles expulsados de España se fueron a Holanda y de allí pasaron a Curazao, de ahí viene la influencia del español en el papiamento.

Las zonas de influencia indígena en la lengua hispanoamericana

Las diferencias entre las diversas zonas no son grandes y están determinadas por los diversos substratos indígenas, la época de colonización, la geografía, la inmigración, etc.

Primera zona

Comprende México y América Central.

El náhuatl es la lengua indígena más importante hablada por los aztecas y en las regiones de las mesetas centrales de México. Se llama nahua al grupo étnico del tronco uto-azteca que habitaba en la meseta del Anahuac. El nahua consta de tres dialectos: náhuatl, náhual y náhuat. Es el grupo lingüístico prehispano más importante de Mesoamérica. El náhuatl-azteca es la lengua que más ha influido en el español, sobre todo en lo tocante al léxico.

Segunda zona

Comprende las Antillas españolas de Santo Domingo, Cuba y Puerto Rico, así como gran parte de Venezuela y la costa atlántica de Colombia.

Las principales lenguas indígenas de esta zona son el arawac (arahuac) y el caribe, que suelen unirse bajo el nombre común de “lenguas de las islas”. Tanto la población como las lenguas indígenas de las Antillas han sido completamente extingidas. El español de estas zonas tiene rasgos arcaicos, y especialmente en Santo Domingo se semeja mucho al de Castilla. El ser la primera zona colonizada, y la influencia de centros como la Universidad de Santo Domingo, la Audiencia y el Arzobispado, han contribuido, sin duda, a la conservación del habla peninsular.

Tercera zona

Comprende la región andina de Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Norte de Chile. El kechua (o quichua) es la lengua indígena má importante. Esta lengua se mantiene viva en la actualidad debido a la gran proporción de población que la sigue hablando. Aparece muy mezclado con el aymará (o aimará), lengua del pueblo amerindio que habita el altiplano andino, entre Bolivia y Perú, especialmente en torno al lago Titicaca. Esta lengua es hablada por el 30% de la población de Bolivia.

Es muy importante la diferencia entre las dos partes montañosas en las que el español es más puro y arcaico, y las de la costa o tierras bajas (este fenómeno es general en la América Hispana, excepto en Chile).

Cuarta zona

Comprende Chile.

El mapuche era la langua de los araucanos. Esta lengua se ha perdido y la población quedó completamente absorvida. El aparente andalucismo de esta zona coincide con el de las tierras bajas. La geografía y el especial aislamiento de Chile han dado un carácter especial a esta región, tanto en el periodo hispano como en la actualidad. Del mapucha recibió el español varios vocablos: poncho (capote de monte), guata (alemán ‘Watte’), ruca (choza).

Quinta zona

Comprende Argentina y Uruguay.

En esta zona de Río de la Plata, la población y su lengua han sido eliminidas y sólo compiten con el español los extranjerismos (italianismos principalmente) de la población inmigrante.

La avasalladora magnitud de las capitales hace que sean grandes las diferencias entre el habla rural (gaucho) y la de Buenos Aires y Montevideo (porteño), muy caracterizada por el voseo y por los abundantes barbarismos que dieron lugar a la creación de un dialecto o jerga, el lunfardo.

El nombre ‘lunfardo’ se deriva de lombard, ‘lombardo’, por la mala fama mercantil de los de dicha procedencia. En este ambiente surgió una jerga delincuente en Buenos Aires. Sus diferencias con el castellano son meramente léxicas, con aportaciones del inglés, francés, italiano y de germanías españolas. Otras palabras lunfardas surgieron por inversión, metáforas, etc. Popularizado por el tango, ha perdido su función original, adquiriendo más tarde cierto carácter literario.

Sexta zona

Comprende el Paraguay y algo del norte de Argentina.

El Paraguay es el país americano que con mayor vigor conserva la lengua indígena, el guaraní; hasta tal punto que la mayor parte de la población se puede considerar como bilingüe. La abundancia de hispanismos en el guaraní contrasta con la escasa influencia de esta lengua en el español.

Enlaces sobre el español de América

Amado Alonso. „Otra Vez Sobre el Origen del Español Americano“. Por: Rumiñawi. En: http://szamora.freeservers.com/espamer.htm

La pronunciación del español americano.

http://www.tulane.edu/~spanling/AmLang/EspAmPron.html

Las zonas dialectales de las Americas

http://www.tulane.edu/~spanling/AmLang/EspAmZonas.html

Historia externa del español americano

http://www.tulane.edu/~spanling/AmHist/HistExtEspAm.html

Diccionario básico lunfardo

http://users.hotlink.com.br/saulob/lunfardo.htm